VÃa Shoemoney, llego hasta esta Super-Proposición-De-Matrimonio. Parece ser que hay alguien en EE.UU. que quiere pedirle matrimonio a su novia, no invitándola a una cena romántica a la luz de las velas con un delicioso manjar, no visitando un rincón entrañable bajo la luz de la luna y las estrellas, no, no amigo mÃo. Lo quiere pedir cogiendo un anuncio de 30 segundas en la próxima SuperBowl. Parece que lo tiene todo bien estudiado, por lo que os recomiendo su lectura.
Vamos a ver hasta donde llega el marketing viral en esta ocasión.Vía Shoemoney, llego hasta esta Super-Proposición-De-Matrimonio. Parece ser que hay alguien en EE.UU. que quiere pedirle matrimonio a su novia, no invitándola a una cena romántica a la luz de las velas con un delicioso manjar, no visitando un rincón entrañable bajo la luz de la luna y las estrellas, no, no amigo mío. Lo quiere pedir cogiendo un anuncio de 30 segundas en la próxima SuperBowl. Parece que lo tiene todo bien estudiado, por lo que os recomiendo su lectura.
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