Los clientes, webmasters o dueños de negocio online quieren tráfico de calidad. Ya hemos hablado sobre el tráfico de calidad y lo relativo y subjetivo que es.
La cuestión radica en que una web que esté correctamente diseñada para vender, debe ser capaz de vender su producto independientemente de donde proceda el usuario.
La web debe estar preparada para vender tanto si el usuario ha llegado desde una brand keyword, desde una búsqueda de un producto particular, o general, o desde una campaña de banners, o desde notas escritas en blogs, o desde reenvios de emails o desde el facebook o twitter…
Caemos en el error de pensar que el usuario es único, cuando realmente tenemos o somos tantos usuarios diferentes como necesidades de ese producto tengamos. Me explico, porque creo que he dicho algo muy friki 🙂
No tenemos el mismo comportamiento cuando busco un calzado por internet sin saber bien lo que busco, es decir, busco información/inspiración, que cuando sé el producto que busco, y cómo lo quiero, que cuando sé la marca y el precio del producto que quiero comprar.
Nosotros podemos montar una estrategia de marketing online con un diseño fantástico de landing pages por cada tipología de usuario o fuente de tráfico. Pero los usuarios nos pueden llegar desde 1000 formas diferentes. Y son en esas 1000 formas diferentes donde tambien debemos estar preparados para vender.
Deberemos tener un buen diseño de la página de «marca», un buen diseño de nuestro producto, y un buen diseño de las ventajas y utilidades de nuestro producto. Es decir, si vendo zapatos, además de hablará que mis zapatos son la leche, explicar porqué es necesario tener unos zapatos que son la leche y que Oh! casualidad, los comercializamos nosotros.
Pues eso es cierto, y no nada más en la web, hasta en la vida real, no es el mismo comportamiento con la familia, que con los amigos y mucho menos cuando se va de compras, no es lo mismo cuando vas a comprar una Tv que cuando vas a comprar una sala, tus objetivos y tu idea son diferentes en todos los casos. Es por eso que es necesaria tener esa coherencia y esa integración en todos nuestros elementos, entre lo que se dice, lo que se ofrece, el producto, y los beneficios, para hacer más atractivo nuestro producto o servicio para los clientes.